Urbanismo, vida activa y mapeo de activos

Patxi Galarraga Aiestaran. Projekta Urbes, País Vasco

Acceso al resumen de la presentación de Patxi Galarraga

Preguntas a modo de reflexión

  • ¿Cómo se podría incluir a agentes del ámbito sanitario en tantos y tantos proyectos que desde el ámbito local tienen un impacto tan alto en la salud de la población?
  • ¿Cuáles serían las principales riquezas que se obtiene de ese esfuerzo añadido de formar un “Foro de ayuntamiento” y otro “Foro social” para proyectos en los que no os lo pedían?

Por un lado, se amortiguan las “alcaldadas” o el peso de prejuicios o cálculos políticos en la toma de decisiones: la presentación de evidencias (formación) y las aportaciones de la ciudadanía (participación), sumado al carácter plural y transversal del foro (cuanto más, mejor), puede modificar la orientación de partidas presupuestarias. Por otro lado, se desempodera al personal técnico y político del área de urbanismo, y se empodera a su vez -“urbanísticamente”- al personal del resto de áreas y a la propia ciudadanía.

  • ¿Podrías citar un ejemplo concreto de herramienta de planificación urbana que hayáis enfocado desde la promoción de la salud?

Los Planes de Accesibilidad son un buen ejemplo: los primeros los hacíamos “normales, como ingenieros de caminos”: un par de entrevistas con el personal técnico de urbanismo, y el resto (diagnóstico, plan de actuaciones y priorización) lo resolvíamos de manera autónoma y “técnica”. En cambio ahora, y a pesar de que un Plan de Accesibilidad es una herramienta concebida para “eliminar barreras”, intentamos abrir el foco con esta mirada positiva. Las ventajas son claras: se está incorporando a las decisiones el punto de vista del resto de áreas municipales, y el de la propia ciudadanía, tenga o no discapacidades.

  • ¿Cómo incorporáis la información cualitativa recogida en los talleres participativos a áreas tan rígidas como Urbanismo? ¿Es posible hacerlo?
  • ¿Qué opinas de esta moda de AgeFriendlyCities, La Ciudad de los Niños, La Ciudad de los Cuidados, HealthyCities, Ciudades Activas, SlowCities, Green Cities…?

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11 comments

  1. En primer lugar, enhorabuena por vuestra iniciativa. Yo estuve ligada en su día a un proyecto de rehabilitación de viviendas en una Zona de Transformación Social donde, con la «excusa» de la rehabilitación, se trabajaban aspectos relacionados con la educación, el empleo, la salud, la cultura, el arte, etc. fue una experiencia increible y aunque no lo llamabamos así, el proyecto estaba impregnado del enfoque de activos por todas partes.

    En nuestro caso, el Ayuntamiento promotor estaba totalmente volcado con este tipo de iniciativas integrales y multidisciplinares, me gustaría saber si a día de hoy, habéis encontrado reticencias para incorporar este enfoque en vuestros proyectos o si por el contrario se acogen de manera favorable.
    Gracias Patxi

  2. Aupa Eva, muchas gracias! No conocía la experiencia de las ZNTS de Andalucía: la verdad es que no sé si exactamente hay que tirar por ahí, pero desde luego hace falta hacer algo en esa línea…

    Antes de empezar, tengo que decirte que -por su tamaño, claro- en ninguno de los aytos para los que hemos hecho proyectos que puedan servir para lo que me preguntas, había un área de salud municipal o personal técnico responsable de «la salud».

    Creo que cada vez los aytos escuchan con mayor atención propuestas de este tipo y la música les empieza a sonar y a gustar: son proyectos de consenso fácil y los procesos no son a priori económicamente caros. Hasta ahí bien, el problema es cuando aparece el “para qué”. Porque, aun teniendo claro el valor que pueden aportar a la comunidad estos procesos por sí mismos, si la intervención está orientada a la acción, al final el proyecto se valorará por su resultado más que por el trabajo realizado durante ese proceso. Y entonces es normal que un ayto haga cálculos, y claro, de ahí sí que pueden llegar las reticencias.

    El cálculo de costes sería múltiple. Por un lado, el coste económico: porque en urbanismo realizar actuaciones significa casi siempre meterse en obras. Y por el otro, el coste político, se haga lo que haga: porque se generan expectativas por encima de las posibilidades, porque se abre un debate que puede salirse de madre, porque al priorizar siempre alguien sale perdiendo, porque en el pasado el ayto no se implicó tanto en otros barrio, porque de cara al futuro el ayto no puede comprometerse a implicarse tanto en otros barrios, etc. De todos ellos, creo que el peor escenario es cuando alcaldía-urbanismo-(ayto) toma una decisión que no se corresponde con lo que proponía «la comunidad»: eso genera frustración, y desconfianza de cara a otros procesos.

    Para vencer estas reticencias podemos echar de varios recursos. Uno de ellos sería la extensa oferta de «marcos» en los que pueden encajar intervenciones de este tipo (Ciudad Amigable con lxs Mayores, con lxs Niñxs, Cuidados, etc.), los cuales sirven a su vez como escaparates para la venta política. Estos sellos serían el “lubricante” que nos ayuda a introducir en los aytos temas como la equidad, porque a palo seco no se yo…

    Otro camino es un clásico: las ayudas económicas, claro. Si aparecen oportunidades financieras los aytos saben reorientar un proyecto y modificarlo para que encaje en las ayudas. Ahora bien, en la virtud está muchas veces el problema, y es que a veces se realiza un uso retorcido de las subvenciones: creo que se debería hilar más fino en el diseño de las ayudas, con el objeto de asegurarla inclusión de la salud en las actuaciones. Por ejemplo: (i) apoyando de manera potente la redacción de diagnósticos y planes, (ii) obligando a incluir en éstos indicadores para orientar las actuaciones hacia la equidad y la promoción de la salud, (iii) fomentando las mesas transversales, tanto horizontalmente (entre áreas municipales) como verticalmente (entre niveles de la administración), (iv) exigiendo determinados indicadores para los procesos de participación, (v) reservando una parte de las ayudas a la evaluación de la actuación, etc.

    Inciso: con esto del dinero no quiero decir que los aytos no se crean el tema de la salud… ¡¡Casi me conformo con que se lo crean en las Consejerías de Salud!! Porque si nos basamos en los presupuestos, la verdad es que a uno le entran dudas. Presupuestos Euskadi-2017: Sanidad=1.500eur/hab, (ii) Salud Pública=18eur/hab, (iii) Ayudas económicas a entidades locales para el fomento de conductas saludables=0,13eur/hab. O sea, una Salud Pública en los huesos, a la que se le agotan los recursos con la protección y la prevención de la salud… Es la lectura que yo hago, en el foro entrará gente que conoce el tem de cerca.

    Una tercera vía que se me ocurre es el de la formación del personal técnico y lxs representantes políticxs de los aytos. Me parece que todo recurso que se dedique a ello estará bien empleado. No en vano, estamos hablando de gente que estará tomando decisiones que afectará a determinantes de la salud de la población durante 5,15 ó 25 años.

    Un último recurso que se me ocurre tiene mucho que ver con la gente de AP. Ocurrió en un municipio en el que colaboramos en un programa de fomento de la salud física, alimentaria y emocional de la población. Al poco de ponerse en marcha, este programa estuvo a punto de cerrarse por una crisis política. Nos comentan lxs responsables del programa que una carta abierta en los medios de comunicación locales firmada por el JUAP de la única UAP del municipio fue decisiva para salvar el programa. Creo que la gente de AP podría aportar mucho a la hora de que un ayto se incline por un proyecto… Dejo la pregunta: ¿conocéis experiencias similares?

    Ostras, lo dejo. Al final no sé si te he respondido o qué.

  3. Enhorabuena Patxi, me encanta todas las iniciativas que estáis haciendo en el Pais Vasco en relación al urbanismo saludable!.
    Tienes razón en lo del presupuesto, de esta manera es muy difícil trabajar y desarrollar la salud pública.

    Desde el proyecto http://www.redlocalsalud.es/quienes-somos/ en Andalucía , tenemos muy claro que una de las claves para el desarrollo de la acción local en salud es el compromiso político de los/las alcaldes/as, ya que sin su impulso es muy complicado el desarrollo.

    Pensando en cómo sensibilizarlos e informarles/formarles en esto, se nos ocurrió realizar estos videos https://www.youtube.com/channel/UCsb32MQ6x2MJuDZx0Qg63qA ,porque barajando la posibilidad de una formación, concluimos que era difícil debido a sus agendas.

    Seguimos dándole vueltas porque es un tema importante, ya que como bien dices, si no conseguimos que conozcan los determinantes de la salud, la salud en todas las políticas, lo que es trabajar con perspectiva de equidad… no vamos a poder avanzar.

    El conocimiento genera compromiso y eso es precisamente lo que necesitamos de los gobernantes, en este caso locales!

  4. Gracias Lola! Tiene muy buena pinta la Red de Acción Local en Salud, la verdad es que no conocía la metodología RELAS. Para empezar, ya me he descargado la «Guía rápida para la elaboración de Planes Locales de Salud»: https://goo.gl/1q5h0L

    Pienso que el esfuerzo realizado en la formación del personal técnico y representación política del ámbito local, por mínimo que sea, puede reportar retornos muy positivos. Formación, (i) en aspectos relacionados con los determinantes y el enfoque en activos, y (ii) en la orientación hacia a la toma de decisiones basada en la información y la evidencia.

    Porque a un político le podrás hasta disculpar (?) la ignorancia, los cálculos, los prejuicios o la ideología. Pero un técnico creo que debería (i) respetar la evidencia y (ii) basar sus decisiones en información, datos, evaluaciones… Y que el día que se jubile pueda decir con seguridad que ha contribuido a crear salud…

  5. Hola!

    Respecto a la pregunta ¿Cómo se podría incluir a agentes del ámbito sanitario en tantos y tantos proyectos que desde el ámbito local tienen un impacto tan alto en la salud de la población? No sé si tendría que haber profesionales vinculados directamente o si lxs técnicxs/dirigentes de Urbanismo en los ayuntamientos deberían recibir una formación básica sobre determinantes sociales de la salud y activos para la salud para ver cómo sus acciones están más que relacionadas con el cuidado de las personas y la mejora(o no) de su salud. Creo que en líneas generales se desconoce el impacto en salud de las políticas urbanísticas (más allá, quizás, de la reducción de barreras arquitectónicas) y por parte de lxs profesionales snitarixs desconocemos qué labores corresponden a cada área de los ayuntamientos.
    Existen iniciativas muy interesantes de vinculación de lxs vecinxs a la mejora de sus barrios, relacionando las áreas de urbanismo, vivienda, servicios sociales, participación: https://rehabitatzaragoza.wordpress.com/tag/disuena-tu-barrio/
    Y creo que son muy interesantes las iniciativas que piensan en el género como un eje de desigualdad urbanística y por tanto una línea de mejora a realizar con mapeos colectivos y/u otras herramientas metodológicas:
    → qué es el urbanismo feminista (Collectiu Punt 6): https://www.youtube.com/watch?v=dI4TOCPMMBA
    → Rediseño de los patios de colegios: http://arainfo.org/proyecto-imagina-tu-patio-un-caso-de-social-design-en-el-ceip-sainz-de-varanda-de-zaragoza/
    En diferentes reuniones para iniciar un proceso de Ciudad de los cuidados he visto cómo para algunas áreas del ayuntamiento resulta difícil en un primer momento entender y explicar cómo urbanismo/movilidad/vivienda…tienen ese impacto en salud del que hablaba antes. Los cambios culturales cuestan…

    1. Aupa Pati!

      Pues sí, desde hace un par de años, sea cual sea la puerta por la que entramos al ayuntamiento (urbanismo y género, ciudad amigable personas mayores, plan de accesibilidad, caminos escolares, rutas del colesterol…), colamos dentro del «proyecto» un proceso participativo con personal técnico y político, en el que incluimos una formación basada en determinantes y promoción de la salud.

      Tal y como les decimos, cualquiera de esas puertas nos llevan más o menos a la misma ciudad… Yo creo que no son muy conscientes del impacto que tienen sus medidas sobre la salud de las personas, pero efectivamente, a poco que presentes el tema con un poco de sentido, lo entienden perfectamente.

      Otra cosa es que «el ayuntamiento» como institución se sienta preparada para girar sus proyectos. Casi creo más en que poco a poco técnicxs municipales (que son lxs que estarán tomando decisiones durante años) vayan cambiando de chip… Será casualidad, pero creo que muchas veces los huesos más duros de roer están en urbanismo.

      Y en mi opinión, aun valorando «a priori» positivamente el efecto beneficioso que tienen los procesos de participación por sí mismos, tenemos que ser capaces de traducir estos «cambios de chip» en intervenciones visibles que se «autoexpliquen» (ensanchamientos de aceras, supresión de aparcamientos, mejoras en una plaza, subvenciones para instalar ascensores o rehabilitar fachadas…) y se correspondan además con aquello que la ciudadanía está demandando.

  6. La conformación de la ciudad es fundamental para la salud de las poblaciones. Personalmente más que pensar en cómo metemos a personas del ámbito sanitario en los proyectos urbanísticos, optaría por una formación en urbanismo saludable o urbanismo con perspectiva de género (que prioriza la sostenibilidad de la vida ante otros modelos más economicistas y, por tanto, la salud) en el personal técnico de los ayuntamientos. Cada vez hay más movimientos y colectivo que defienden otro tipo de urbanismo o de movilidad…el movimiento alrededor de los comunes urbanos es cada vez mayor. Si unimos los procesos de formación junto con un proceso participativo que sea una especie de «Plan Integral del barrio», es perfectamente factible que los procesos urbanísticos estén enfocados hacia lo saludable. Apostaría por modelos integrales, ya que ese modelo integra visiones desde la educación o desde el feminismo. Yo creo que si hay voluntad es fácil hacer que la gente participe en torno a las infraestructuras y la conformación de su barrio. Mi experiencia es que se dan muchas veces foros participativos sobre temas urbanísticos donde coincide gran variedad de agentes locales y movimientos vecinales, pero que la traducción de esto en realidad es mínima, lo cual hace que la gente se desilusione y deje de participar.

    1. Aupa Vicky!

      Es precisamente en la última fase donde echo en falta a «la gente de la salud». Como comentaba con Pati, y también lo ves claro, hace falta que en el ayuntamiento «lxs tomadorxs de decisiones» tengan claro que con cada una de sus decisiones (una línea en el plano, una partida presupuestaria, un párrafo en una ordenanza) están creando o destruyendo salud.

      Que sus decisiones tienen un gran impacto sobre la salud, y se puede hacer que muchas de estas decisiones ayuden a generar salud, sobre todo a aquellos grupos de población más expuestos. Inciso: la sensación que me queda es que así como «determinantes» o «activos» son recibidos/entendidos por igual tanto por técnicxs como por políticxs, lo de la «equidad» depende mucho de la sensibilidad social del equipo de gobierno, porque les exige un esfuerzo muy importante, sobre todo en comunicación.

      Total, que voy a lo de la última fase: tengo la sensación de que muchas propuestas que parten de procesos de participación cogerían mucho más peso si recibieran el respaldo y la «justificación sanitaria» de, por ejemplo, todxs lxs trabajadorxs del centro de salud del barrio o del municipio. Que podrían actuar como lobby con el que se puede contar para apoyar intervenciones que, desde la evidencia, supondrían una mejora en la salud de la población. O para tumbar proyectos (nuevo centro comercial, determinadas «regeneraciones urbanas», etc.).

      En ese sentido ¿no haría falta también algo de formación entre lxs trabajadorxs de los centros de salud?

  7. Estimados amigos y amigas desde el Ayuntamiento de Zaragoza compartimos esta experiencia por si os es de utilidad en vuestro interesante congreso, al que no nos es posible asistir.

    CARTOGRAFÍA EMOCIONAL DE LA INFRAESTRUCTURA VERDE DE ZARAGOZA.
    Un mapa emocional de la ciudad construido por las personas mayores y las jóvenes.

    El Ayuntamiento de Zaragoza trabaja para desarrollar una Plan Director de la Infraestructura Verde. Una herramienta de planificación integradora que busca crear una red interconectada de espacios naturales y urbanos de diverso tipo: parques, zonas verdes, bulevares arbolados, ríos y riberas, estepa, huerta… El objetivo es contribuir al desarrollo territorial, a la adaptación al cambio climático o la mejora del medio ambiente general y de la salud y calidad de vida de la ciudadanía.

    Para divulgar este concepto, ponerlo en valor y recabar información de grupos de interés, como son las personas mayores y las jóvenes, la Agencia de Medio Ambiente y Sostenibilidad realiza, en colaboración con el Grupo de Estudios en Ordenación del Territorio de la Universidad de Zaragoza, unas charlas-taller en las que se pretende diseñar una cartografía emocional de la infraestructura verde.
    Todas estas acciones se inscriben dentro del proyecto Life Zaragoza Natural, “Creación, gestión y promoción de la infraestructura verde de Zaragoza” (LIFE 12/ENV/ES/000567), y en concreto en la acción B10: Campaña de promoción ciudadana en el entorno de Zaragoza.

    Con las personas mayores las charlas se imparten a través de los centros de convivencia de mayores. Las sesiones, de una duración de noventa minutos, se desarrollan combinando presentaciones audiovisuales, comentarios y procesos participativos. También se realizan grabaciones de las vivencias y recuerdos para recuperar el conocimiento de estas personas en relación al medio natural.
    Se trabaja con las seis emociones básicas: alegría, tristeza, sorpresa, miedo, rabia y rechazo/asco. Algunas ideas que se plantean sobre las emociones básicas:

    • Me encanta este lugar porque…
    • Ahora está mucho más bonito porque…y por eso ahora paso más…
    • Este lugar me produce tristeza porque…
    • Cuando estoy triste vengo aquí y así me animo porque me gusta…
    • Este sitio no me gusta nada porque…
    • Ya no me gusta este lugar porque
    • Antes me gustaba más porque…
    • No suelo venir por aquí porque me produce asco por…
    • Me encanta venir por aquí porque siempre algo te sorprende como por
    ejemplo…
    • Suelo cambiar los caminos de mi rutina para descubrir nuevos lugares de
    Zaragoza…
    • Siento rabia cuando vengo por aquí porque…

    Además, se tienen en cuenta los cinco sentidos para conjugar con cada una de las emociones y poder plantear algunas cuestiones como:
    • ¿A qué huele esta zona? ¿recuerda algún olor asociado a
    alguna estación del año concreta? ¿ha dejado de ir por algunos sitios por su
    olor? ¿y al contrario? ¿recuerda algún olor de infancia asociado a alguna IV?
    • ¿Qué textura tiene?, ¿le resulta agradable pasear por ella o al contrario?
    • ¿Tiene sonidos? ¿escucha los sonidos mientras pasea por ella?, ¿los sonidos
    de la naturaleza pasan desapercibidos mientras pasea por los ruidos propios
    de la cuidad? • ¿Qué color le sugiere esta zona? ¿aprecia si hay cambios de color a lo largo del año o no había reparado en ello? ¿y a lo largo del día? • ¿Le recuerda a algún sabor especial pasear por ella? (por ejemplo, a castañas,
    a fruta o verdura…).

    Con todo ello se cartografía la ciudad a través de los recuerdos y las emociones de nuestros mayores, un mapa de la imagen verde de la ciudad.

    Con los jóvenes, universitarios principalmente de Turismo, Geografía y Educación, se trabaja de manera similar pero adaptando la estructura y contenidos a estos destinatarios. Aquí las sesiones duran dos horas e igualmente se llevan a cabo cartografías emocionales colaborativas.

    Unas finalizadas las sesiones con ambos grupos (primera quincena de junio), se procederá al análisis y estudio de las actividades, de donde se podrán extraer las conclusiones que correspondan. Los resultados estarán disponibles y se difundirán a partir de julio de 2017.

    Tenéis más información y vídeos de la actividad en los siguientes enlaces:
    http://www.zaragoza.es/ciudad/medioambiente/detalle_Noticia?id=225348
    http://www.aragondigital.es/movil/noticia.asp?notid=156099&secid=4

    Muchas gracias por vuestra atención

  8. Como comentais, creo que es clave empezar por la formación en determinantes y salud en todas las políticas y que se conozca la evidencia que hay detrás. Aunque hablamos de urbanismo, por supuesto formación de todos los sectores, y tanto de técnicos como de políticos (ojo con los municipios más pequeños sin técnicos prácticamente). Es importante que todos compartan esa visión para que no surjan frenos o limitaciones «desde arriba», que se comprenda la importancia de trabajar todos juntos, de proyectos/procesos intersectoriales e integrales.

    Y fundamtal cuando se inician procesos participativos con la ciudadanía, que conoce perfectamente las dificultades a las que se enfrenta en el día a día y las riquezas de su territorio, que realmente sean tal, participativos, que sean procesos horizontales donde su opinión sea tenida en cuenta.

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